Así Será.
¿En las buenas o en las malas, así es como se debe ser?
Quice leer cualquier cosa para despejar mi mente, busquè y no encontrè. No hubo nada que me ponga en razón.
La soledad es la única razon que existe ahora, no hay amistad que valga la pena. Mucho menos cuando eres hipoacùsico. Todos son alguien para todos pero, tù no eres nada para nadie, porque nadie te comprende, nadie es para ti en èstas condiciones, simplemente eres alguien indiferente, es la primera impresión que brindas, es lo primero que estudian de ti. No habrà nada que cambie sus modo de pensar.
Un hipoacùsico merece respeto y como éste no podrá interactuar de una manera - como otros llamarìan - normal. Notan un comportamiento, uraño, indiferente, orgulloso, egoista. Lo cual es todo lo contrario. Nadie se imagina el sufrimiento de por vida, aun antes de tener uso de razòn. Se aprende a convivir con ello. El respeto se lo gana a donde vayamos y no es fácil tolerar tantas cosas.
Siendo hipoacùsico, deshonrientado de todo, me perdì en la tristeza, soledad y tension por casi toda mi vida, quizá ahora que comprendo lo que me tocò vivir, las cosas cambiaron en cierto modo para conmigo, aùn asi dejar la soledad y la tristeza, aùn no ha sido posible.
Vi un vìdeo con una historìa bìblica, titulada El Administrador Corrupto (no recuerdo exactamente el nombre) que, me hizo reflexionar un poco, no sè si para bien o para mal:
"Si no logras ganar confianza en lo poco, tampoco lo ganaràs en lo mucho, si no logras tener amigos en lo poco, tampoco lo lograràs en lo mucho, a lo mejor vendràn muchos pero no habrà fidelidad."
Ésta historia me crea un poco de incertidumbre, temor, porque si en èste estado, no tengo gente que sea leal. Ahora que soy conciente de los acontecimientos, es poco probable que logre tener compañias verdaderas cuando supere el defecto.
Por momentos largos mi soledad, era tan abrumadora que era incapaz de ejercer resistencia. El orar que era como hablar con Dios, quiza me desahogaba, sin importar que nada cambie y haya cambiando en el exterior. Recuerdo que le pedi llevarme a donde quiera, aùn si era posible a la fuerza, porque conocer mi destino real es lo que más quiero - ése deseo aún sigue presente - considero que jamás pasará porque no estoy poniendo de mi parte. La soledad tambièn me abate cuando estoy con personas de su simpatia.
Le pido un poco de misericordia, para que se le antoje hacer que la gente me comprenda porque es lo que hago con ellos.
Está bien. Así es, te adoraré en el mal y si un dia me das lo que deseo, te seguirè adorando.